Y es tan fácil de hacer que ni merece el nombre de receta pero, oye, yo tampoco sabía hace tiempo que era tan sencilla. Me trae recuerdos de mis tiempos de au pair por tierras inglesas, aquí ni se conocía y desde que la probé me encantó y eso que no es que me entusiasmen los frutos secos, la verdad, no es que no me gusten, pero para un puñadito de vez en cuando y depende de cuales sean, las avellanas no las puedo ni ver, por ejemplo. En una tostada y con mermelada está de vicio, aunque mi combinación preferida era con lemon curd, ñami, ñami. Sirve para elaborar postres o para comértela a cucharadas... Qué caramba! Y vi un postre en Instagram que llevaba mantequilla de cacahuete, pero no tenía. Era una tarde ociosa de sábado y andaba vegetando entre televisión, que no me gusta nada, lectura y un poquito de redes sociales para cotillear, y recordé que tenía una bolsa de cacahuetes por la despensa, así que dicho y hecho, me puse manos a la obra. By the way, no guardé el postre y ahora m