No sabía muy bien cómo llamar a la entrada, en otros tiempos a este tipo de elaboración se les llamaba "niños envueltos", pero como hoy en día hay que estar pendiente de lo que es políticamente correcto, no se si ese término puede herir susceptibilidades, así que lo dejamos en el término literal para que nadie se ofenda. Dicho esto, el otro día tenía unos filetes de ternera y no me apetecía hacerlos a la plancha como de costumbre, así que mirando por la nevera, decidí hacer una especie de "Cachopos Keto", que ya se que no tienen nada que ver con un cachopo, que me perdonen los puristas, pero cada cual a lo suyo y a mi me salió ese nombre, no es por otra cosa. Es que ultimamente me ha dado por intentar cambiar recetas normales a bajas en hidratos de carbono, que tampoco hay muchas en español por estos mundos, y las que hay son traducciones más o menos acertadas, así que yo a mi bola, cosa bastante habitual en mi persona. Ingredientes: - Filetes de ternera. Yo hice un

Mi hijo ha cogido un auténtico vicio con las galletas cetogénicas de chocolate, algo inexplicable porque es un poco "especialito" para comer. Ayer me dijo que tenía que hacerle más y hasta hoy por la tarde no he podido ponerme con ello. Tenía ganas de probar a hacer las galletas con yogur, por aquello de que queden más cremosas y esta era mi oportunidad, aunque ya me echó la bronca porque no llevan chocolate, bueno una bronca cariñosa fruto de la buenísima relación que nos une. Le prometí que las próximas volverán a llevar chocolate, aunque igual prueba estas y cambia de parecer. Aún las tengo enfriando, ni siquiera han pasado el control de calidad, pero me pongo a avanzar y voy redactando, porque la verdad es que huelen súper bien y estoy segura de que van a estar muy ricas, en caso contrario esta entrada no verá nunca la luz. ¡Sorpresa! el yogur les ha dado esponjosidad, y lo que empezó siendo un intento de galletas, se ha convertido en unos bizcochitos suaves y ricos. Ingr

Los torreznos te pueden encantar o no gustar, bueno, yo no conozco a nadie a quien no le gusten, al menos de momento, pero es una de esas cosas en las que no existe el término medio. Unos torreznicos de Soria con una cerveza bien fría son el sumun del placer, recuerdan tanto a terrazas de verano como a barras de bar en invierno.  Esta entrada se la dedico a Álvaro, un buen amigo de mi hijo el pequeño, porque siempre estamos hablando de unos torreznos con una cervecita, y los tomaremos en un bareto, en cuanto las circunstancias sean propicias... ¡Prometido! Su historia está vinculada a la época de la matanza del cerdo, que se hacía en muchos pueblos de España, y se preparaban diferentes elaboraciones para que durasen en la despensa el mayor tiempo posible y así poder disponer de ellas durante todo el año. El torrezno es la panceta del cerdo, en un principio se freían en grandes ollas llenas de manteca para preservarlos, ya que en Soria había mucho ganado lanar y muchas personas se dedic

  En las dietas se suele echar de menos el pan, salvo las personas a las que no les gusta, claro. Cuando haces una dieta baja en carbohidratos puedes comer muchas cosas ricas que quedan mejor si van entre dos trozos de pan y te solucionas una cena, por ejemplo, o una comida si te quieres zampar una hamburguesa. Hay otra opción que es sustituir el pan por hojas de lechuga, pero no es lo mismo. Vi esta receta en Diet Doctor, y le hice unas pequeñas modificaciones. Os digo lo de siempre, no es pan real y no a todo el mundo le hace gracia, todas las recetas que no llevan las harinas a las que estamos acostumbrados tiene una consistencia una tanto de goma, es cuestión de cambiar un poco la mentalidad y no pensar en que te vas a comer un pan crujiente, porque no cruje nada de nada, avisados quedáis. Vamos a utilizar un ingrediente un tanto especial cáscara de psyllium. El psyllium proviene de una planta denominada plantago ovata.  Una de sus características principales es que absorbe el agua

De la unión de dos recetas, sale otra. Bueno, os digo la verdad, en vez de hacer una única entrada con la tarta, hice una entrada con el bizcocho de limón y otra con el curd de frambuesa, por si sólo os interesa una de ellas. De todos modos os dejo aquí enlace a las dos para que no tengáis que andar buscándolas. Bizcocho súper jugoso de limón Curd de frambuesas Ya os comenté en la entrada del bizcocho que es tan, tan jugoso, que no va a hacer falta meter una capa de relleno, de hecho, va empapado con un sirope de limón que le da mucha humedad. Pero vosotros decidís cómo hacerla. Yo simplemente la cubrí con el curd de frambuesas y le puse de adorno unas frambuesas frescas, por aquello de darle más aspecto de tarta. Hoy, entrada cortita, que ya hice los deberes en su día. ¡Por cierto! Supongo que la guardaréis en la nevera, como está mandado, pero no olvidéis sacarla como unos quince minutillos o un poco más antes de degustarla, ya que debe atemperarse. ESPERO QUE OS GUSTE!!!

La traducción literal de curd es cuajada. Realmente es una crema de frutas cuajada que queda muy cremosa. La más popular es la de limón o Lemon Curd, tenéis la receta aquí en el blog, además puse una receta para microondas. A finales del siglo XIX y principios del siglo XX era muy popular servir lemon curd con pan o scones para acompañar el te, como una alternativa a la mermelada. Se elaboraba en pequeñas cantidades, ya que no se conserva tan bien. Hoy con las neveras tienen una vida un poco más larga. Yo hice una cantidad suficiente para cubrir un bizcocho de 20 cm, como no tenía previsto hacer ningún dulce más, tampoco tenía sentido hacer una cantidad mayor, así que las cantidades que os doy llenan un bote de cristal de 8 cm de alto (medido sin la tapa) por 6 cm. de diámetro. Esta vez lo voy a hacer a la manera tradicional. Ingredientes: - 90 gr de frambuesas frescas - 140 gr de azúcar - 2 yemas de huevo tamaño L - 58 gr de mantequilla sin sal - 35 ml de zumo de limón natural - Una p